miércoles, 9 de enero de 2013

POEMA RESCATADO


EL ÚLTIMO SILENCIO DE MACHADO

El invierno le ha echado hacia la orilla
donde el mar nos enseña
que la vida es frágil amapola
que se muere en un día.
Las olas rompiendo en espumas
sobre la carne rosa de la playa
se reflejan en su mirada agónica
mientras su corazón piensa en la oscura
mordaza de la losa. Ya no tienen
lugar aquí los versos. Los poemas
son luz que al tiempo nublan.
Sólo quedan los ojos asidos al silencio.
El último silencio de Machado.
La esencia iluminada del poema.

 



















El invierno le aparta de la vida.
Y regresa al hotel para dejarse
en los brazos de la Palabra única
y firma con el alma su pecado.

 
Su pecado tremendo de llamarse
don Antonio Machado, fiel obrero
del andamio de no ofender a nadie.
Su pecado tremendo de buscar
a Dios en las palabras y en la niebla
y encontrarlo en la playa de Colliure.
El último silencio fue en febrero,
y hoy, palabra de oro que renace
mientras digo su nombre en el poema.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario